El Narval crea aulas al aire libre para reducir el riesgo de contagio

Escrito por Agracer. 13 de septiembre de 2020, domingo
El colegio del Polígono Santa Ana ha instalado carpas en su patio y ha solicitado el uso del paseo de Palermo y del parque de Los Exploradores para celebrar clases docentes. Se trata de una medida innovadora que tiene su base a que el coronavirus se expande más en lugares cerrados, por lo que también han quitado las ventanas del centro.


Los centros docentes de la Región de Murcia deben adaptarse a las normas divulgadas por la consejería de Salud para el inicio del curso, a las que se unen las adoptadas por cada centro en pos de elevar al máximo la seguridad de sus alumnos frente a la amenaza del Covid-19. En algunos se ha dado más de 'una vuelta de tuerca', como es el caso del Colegio Narval, que se han convertido en innovador en este terreno.

"El pasado 11 de junio se creó una 'comisión covid' en el centro, que de forma inmediata empezó a trabajar en adaptar las instalaciones a las medidas decretadas por la consejería de Salud. Sin embargo, en un claro ejemplo de responsabilidad, se trató de responder a una pregunta: ¿Qué más podemos hacer? A partir de ahí se gestó todo, aprovechando también que dentro de este grupo está el padre de un alumno que es pediatra en el hospital de la Arrixaca y especialista en salud medioambiental, el doctor Juan Antonio Ortega, quien comenzó efectuando unos consejos que han terminado por convertirse en un proyecto innovado", explica a este diario Guillermo Parrón, presidente del Colegio Narval.

Ortega expuso que el virus tiende expandirse más rápido en espacios cerrados, "por lo que se decidió en recurrir al aire libre y el objetivo es impartir, como mínimo, el cincuenta por ciento de las clases fuera del aula", expone Parrón. Para ese fin, se han habilitado dos grandes carpas (capacidad para acoger dos o tres clases a la vez), que acogerán este lunes a los primeros alumnos, y se ha solicitado permiso al Ayuntamiento de Cartagena y a la Entidad de Conservación del Polígono Santa Ana "para hacer uso del Parque de los Exploradores y del paseo Palermo", indicando que la asociación de madres y padres ha adquirido doscientos taburetes portátiles para su uso en espacios abiertos. "Dado el entorno el Colegio Narval, disponemos de zonas verdes próximas que son importantes en este proyecto, para el que tratamos de impartir el mayor tiempo posible al aire libre", añade.

Las aulas tendrán un máximo de veinte alumnos y, dentro de un sistema rotatorio, los alumnos de Infantil harán uso de este sistema 5 días a la semana, 4 lo harán los de Primaria, 3 los de ESO y 2 los de Bachiller.

Las actuaciones no quedan ahí, pues también han quitado todas las ventanas de las aulas "para que circule libremente el aire, por lo que también las puertas estarán abiertas. Hay que conseguir una ventilación natural", señala el director.

Este innovador proyecto no sólo conlleva un esfuerzo personal, sino también económico, pero el objetivo merece la pena. "Sabemos que el riesgo cero no existe y que, en gran parte, los contagios son una lotería, pero nosotros debemos poner todo los que esté en nuestra manod", manifiesta Guillermo Parrón.

El Colegio Narval cuenta con mil quinientos alumnos y cien profesores distribuidos en cuatro líneas de enseñanza: Infantil, Primaria, ESO y Bachiller.
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