Romanos que dejan huella en Carthago Nova

Escrito por Gema Buendía Tenedor y Jorge Blázquez. Fotos: Jorge Blázquez (Estudio 49). 2 de septiembre de 2019, lunes

El general Escipión y su esposa, Emilia Paula, celebraron su tradicional cena de Estado Mayor y Bona Dea en un evento que marca el inicio de las fiestas para el bando romano, ya que es el primer acto oficial que se desarrolla en la recta final hacia las fiestas de Carthagineses y Romanos. Los galardonados en la velada fueron Francisco Javier Argudo, Rubén Cayuela, legión de Amazonas de Capadocia y Pedro López Baquero. GALERÍA DE FOTOS de Jorge Blázquez-Estudio 49 (pinchar aquí)


Durante la cena se hicieron entrega de los tradicionales premios que otorga el Estado Mayor y la Hermandad de la Bona Dea. En esta ocasión, Emilia Paula quiso reconocer con una corona de laurel, el esfuerzo, la generosidad y la lucha de Francisco Javier Argudo de la legión de Sagunto, artesano de las fiestas que tan vinculado está a éstas y a la propia dómina. A continuación, Escipión nombró como abanderado a Rubén Cayuela de la Guardia Pretoriana. Una “apuesta personal” del general romano ya que “desde el primer momento siempre ha estado dispuesto a sumar, y a base de esfuerzo ha conseguido que muchos de sus compañeros vuelvan a tener ilusión en esto”.



Para el premio a la Hermana Predilecta de la Bona Dea, la hermandad eligió a la Legión Amazonas de Capadocia, siendo la primera vez que se otorga a un colectivo de mujeres en lugar de a una persona individual. Emilia Paula destacó que el reconocimiento viene motivado por “ser unas mujeres que rompieron moldes y sirven de inspiración para muchas otras”. La dómina quiso regalar a la legión un nuevo estandarte, en tela de cuero en el que se podía leer Amazonas de Capadocia en dorado y un pelta repujado a mano por el artesano Francisco Javier Argudo.

El momento más emotivo de la noche llegó con la entrega, a título póstumo, del Legado de Honor, cuyo homenajeado fue Pedro López Baquero. El galardón, una placa grabada, fue recogido por sus tres hijos (Pedro, Mikel y Amaia), tras la lectura de un poema que el propio Pedro dejó escrito. Los más de 160 asistentes, se pusieron en pie para aplaudir a modo de homenaje, a éste conocido y querido festero de la legión Fuerza de Choque Extraordinarii.

El resto de la noche transcurrió con normalidad, en un ambiente de compañerismo y fraternidad entre todos los festeros asistentes, entre los que no sólo hubo romanos, sino también varios amigos carthagineses. Asistieron, entre otros, los personajes Anibal e Himilce (Víctor y Carmen) y presidentes y otros representantes de Senado, Consejo y Federación.

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