La sede de los festejos españoles vuelve a estar en Cartagena

La villa burgalesa de Oña acogió la asamblea anual de la Asociación Española de las Fiestas y Recreaciones Históricas. Al acto acudieron representantes de hasta 19 recreaciones de toda España y se abordaron temas como la remodelación de la junta directiva o la incorporación de cinco nuevas fiestas a la asociación. Por decisión unánime, se aprobó finalmente que la sede de la asociación vuelva a estar en Cartagena.


El pasado sábado 29 de abril se celebraba esta asamblea en la que estuvieron presentes el presidente de la Asociación Española de Fiestas y Recreaciones Históricas (AEFRH), Antonio Madrid; el presidente de la Federación de Tropas y Legiones y de las fiestas de Carthagineses y Romanos, Jose Antonio Meca -que al mismo tiempo ostenta el cargo de vicepresidente de la AEFRH); y el vocal de Fiestas Históricas Pedro Vidal.


Al acto acudieron los representantes de hasta 19 recreaciones de toda España. Entre los temas tratados durante la reunión, se abordó la remodelación de la junta directiva y se presentaron las cinco nuevas fiestas que se han incorporado a la asociación. Estas nuevas incorporaciones son las ‘Ibero Romanas de Cástulo’, en Linares (Jaen); el ‘Reino de Nájera’, en Nájera (La Rioja); ‘La Paz de las Alpujarras’, en Padules (Almería); ‘Homenaje a Guillem de Mont-Rodón’, en Monzón (Huesca) y ‘Fin de Semana Cidiano’, en Burgos. El último punto a tratar fue el de decidir cuál sería el lugar que acogería la asamblea el próximo año. Se acordó que sería en Ribavavia (Orense), coincidiendo con el 30 aniversario de la ‘Festa Historia’ de dicha ciudad. Por decisión unánime, se aprobó también que la sede de la AEFRH vuelva a estar en Cartagena.


Por la tarde, los miembros de la asociación visitaron el monasterio del San Salvador, estructura arquitectónica románica del último cuarto del siglo XI. Por la noche, todos los participantes, ataviados con sus trajes de época, hicieron un pequeño desfile por las calles de Oña, siendo aclamados y festejados por los vecinos allí congregados, entusiasmados por las vestimentas de las distintas épocas.